Cristal templado: La elección segura y versátil para tus proyectos de vidrio
Cuando se trata de vidrios duraderos y seguros, el cristal templado destaca como una opción confiable y versátil.
A la hora de construir o reformar un hogar, las dudas sobre los aspectos que se deben tener en cuenta a la hora de elegir las ventanas son las primeras en aparecer. Y es que hay preguntas que se mantienen pasen los años que pasen. ¿De qué tamaño necesito los perfiles o marcos? ¿Es mejor el PVC, la madera o el aluminio? ¿Podré adaptar los colores y acabados a mis gustos y preferencias decorativas? En definitiva, elegir y acertar con las ventanas de casa se convierte en una tarea complicada. Y el camino más adecuado y sencillo para conseguirlo pasa por adquirir los conocimientos necesarios para adaptar nuestras necesidades reales a la oferta disponible.
La estética, el confort, el ahorro, la eficiencia energética, el aislamiento térmico… Son muchos los factores que barajamos a la hora de visualizar las ventanas de nuestra nueva casa (sea obra nueva o reforma). Y para satisfacerlos todos [o casi todos] de la manera más completa posible, se deben tener en cuenta cuatro claves fundamentales:
El material. Madera, PVC o aluminio.
La forma, el tamaño y la apertura. Estas características dependen tanto del espacio del que dispongamos para colocar las nuevas ventanas, como del diseño que nos guste: corredera, elevable, oscilo-batiente, practicable, plegable… Hay un tipo para cada caso.
El mantenimiento o la relación durabilidad-precio. Cuando te preguntes cómo acertar al elegir las ventanas, debes tener en cuenta una premisa: el precio no lo es todo. Antes de pagar la instalación y ponerse manos a la obra, investiga cómo será el mantenimiento posterior, la calidad de los materiales y su vida útil. Haz que la inversión merezca la pena.
La capacidad de aislamiento. El broche de oro. Las ventanas de un hogar deben ser capaces de garantizar por sí solas el máximo confort. ¿Cómo? Aislando de las temperaturas exteriores, el ruido y las condiciones adversas como las corrientes de aire.
Entre las respuestas sobre cómo elegir las ventanas ideales para cada tipo de hogar, la principal rivalidad la encontramos entre el PVC y el aluminio. La calidad y las prestaciones de los materiales son las que deben marcar aquí la diferencia. Mientras que los perfiles de PVC son aislantes por naturaleza, los compuestos o constituidos por metales necesitan elementos especiales (para romper los puentes térmicos que se producen entre materiales conductores) para proteger del frío y el calor externos.
Aun así, casi en igualdad de condiciones, la ventaja de emplear un material “no conductor” en los perfiles de PVC los convierten en la mejor elección. Con ellos, no solo nos protegemos y aislamos de las temperaturas y condiciones externas, sino que favorecen el ahorro energético y el máximo confort. Con un amplio abanico de acabados y colores, un mantenimiento sencillo y una durabilidad de casi 50 años todas las dudas quedan resueltas.
Cuando se trata de vidrios duraderos y seguros, el cristal templado destaca como una opción confiable y versátil.
En el diseño contemporáneo de fachadas, la combinación de materiales ofrece una amplia paleta creativa para lograr expresiones arquitectónicas únicas.
¿Te has preguntado alguna vez qué es el PVC? ¿Sabías que muchos de los objetos que nos ayudan con nuestro día a día están compuestos de este material?
Sus propiedades aislantes, ecológicas y su compatibilidad con las últimas técnicas de fabricación lo han hecho superar a materiales tradicionales como el aluminio o la madera.